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La Dirección General de Tráfico (DGT) ha hecho públicas las nuevas normas que regulan el uso de los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), entre ellos los patinetes eléctricos, con el objetivo de mejorar la seguridad vial y reducir los accidentes relacionados con estos medios de transporte cada vez más populares en las ciudades.
Entre las principales medidas destacan las sanciones por conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, que serán las mismas que las aplicadas a los conductores de otros vehículos, con multas que oscilan entre los 500 y los 1.000 euros. También queda prohibido el uso del teléfono móvil o de auriculares durante la conducción, infracciones que conllevan sanciones de 200 euros.
La normativa establece además que no se podrá circular por aceras ni zonas peatonales, y se contempla la posibilidad de que los ayuntamientos obliguen al uso del casco u otros elementos de protección, con sanciones en caso de incumplimiento. Asimismo, se considera conducción negligente la circulación nocturna sin alumbrado o prendas reflectantes.
Otro aspecto importante es que los patinetes eléctricos están limitados a un solo pasajero: llevar acompañante podrá ser multado con 100 euros. En el caso de infracciones cometidas por menores de edad, serán los padres o tutores los responsables de las sanciones.
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Con estas instrucciones, la DGT pretende reforzar la seguridad tanto de los usuarios de VMP como del resto de peatones y conductores, en un contexto de crecimiento del uso de estos vehículos en entornos urbanos.
