El portavoz de Vox en el Parlamento andaluz, Manuel Gavira, ha denunciado este jueves la celebración de actividades relacionadas con la fiesta musulmana del Cordero en un colegio público de Algeciras, calificando el hecho como un “síntoma de islamización planificada y subvencionada” en Andalucía. En su comparecencia ante los medios, Gavira arremetió contra la Junta de Andalucía, a la que acusó de ser «cómplice de una rendición cultural», y criticó duramente tanto al Partido Popular como al PSOE por «blanquear» estas iniciativas.
“¿Se imaginan que se pidiera a niños musulmanes que se familiaricen con las costumbres cristianas trayendo jamón a clase?”, cuestionó Gavira, quien aseguró que “no hay valor” para hacer lo contrario. Según el dirigente de Vox, el programa de lengua y cultura árabe en los colegios andaluces forma parte de un “plan de islamización” promovido desde instancias extranjeras y permitido por la administración autonómica.
En su intervención, enmarcada en la campaña nacional de Vox «Stop Islamización», Gavira afirmó que “la comunidad educativa fomenta una cultura incompatible con la nuestra”, y advirtió que el caso de Algeciras es un ejemplo de un proceso que, según él, se está extendiendo por todo el territorio.
Críticas a la Conferencia de Presidentes y propuestas en vivienda
Gavira también se refirió a la Conferencia de Presidentes celebrada en La Palma, a la que calificó como “un paripé” y acusó al Partido Popular de “pleitesía” hacia Pedro Sánchez. “Hoy todos le han dado la mano al capo de la mafia, y el domingo saldrán a la calle diciendo que su gobierno es ilegítimo”, señaló.
Preguntado sobre la problemática de la vivienda, tema planteado por el Gobierno central y el PP en dicha conferencia, Gavira responsabilizó a ambos grandes partidos del fracaso en políticas de acceso a la vivienda. “Llevamos 25 años de siglo y no han hecho nada. Ahora se acuerdan del problema”, sentenció.
El portavoz defendió las propuestas de Vox en esta materia, basadas en la liberalización del suelo, la construcción de vivienda pública y una reducción de impuestos como el IVA, transmisiones patrimoniales o actos jurídicos documentados. “La vivienda pública se puede construir. Lo que no se puede es mirar hacia otro lado durante décadas”, concluyó.